A pesar del lugar subalterno en el que se intentó mantener a las mujeres a lo largo de la historia, muchas lograron, valiéndose de su inteligencia y habilidad política, ejercer su poder desde las sombras.
Emperatriz Nur Jahan: mujer del emperador mongol Jahangir, Nur Jahan fue quien verdaderamente gobernó durante su reinado, ya que el hombre era alcohólico y adicto al opio. Hábil estratega militar y política, tras su muerte, en 1645, fue condecorada con el título de “Luz del Mundo”.
Emperatriz Zoe: Zoe gobernó el Imperio Bizantino entre 1028 y 1050. Por su condición de mujer tuvo que ejercer su poder a través de sus tres maridos (dos de los cuales fueron asesinados) que ocupaban el cargo oficial.
Faraona Hatshepsut: fue la única mujer faraona del Antiguo Egipto. Gobernó entre 1490–1468 a. C.. Para poder ejercer su cargo, solía presentarse vestida de varón, e incluso portando una barba falsa.
Emperatriz Wei: En el siglo VIII, durante la Dinastía Tang, la Emperatriz Wei gobernó el destino de China, oculta tras la sombra de su marido el Emperador Zhongtong. Luego de la muerte del monarca, Wei fue asesinada por sus propios soldados.
Papisa Juana: la historia dice que en el siglo IX una mujer logró engañar a todo el poder eclesiástico disfrazándose de hombre para acceder al mayor cargo de la Iglesia Católica, convirtiéndose en 855 en el Papa Benedicto III.
Fuente: tuhistory / MF
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