El piloto Frank Pisano y su esposa Janan, habían despegado del aeropuerto John Wayne de Orange, California. Después de cuatro minutos de vuelo, notó un desperfecto mecánico en el motos, por lo que decidió volver.
Frank ya no puedo llegar al aeropuerto y tuvo que aterrizar de emergencia en una autopista. Ante esta situación de incertidumbre, Janan cerró sus ojos y comenzó a clamar: "Dios, tú estás con nosotros, ayúdanos".
En eso, la avioneta estaba descendiendo demasiado rápido y tuvo que maniobrar para el aterrizaje, Cuando tocó la pista, el pequeño avión cayó "como un globo de plomo" y ya no pudo controlarlo. "Había postes de luz en la carretera que si lo hubiese golpeado, habrían explotado y estaríamos muerto. Eso es un milagro", dijo Frank.
El avión golpeó la parte delantera de una camioneta que tomó el ala para llegar a la barrera. "si no hubiéramos chocado con ese vehículo, habríamos entrado en la barrera inicial y estaríamos muertos." Fue el tercer milagro ", recordó Frank."
Después del accidente, el avión fue tomado por las llamas. Debido al impacto, Frank tenía seis vértebras rotas y Janan tenía cinco vértebras afectadas. Ambos estaban inconscientes, pero pronto se despertaron y se las arreglaron para ser removidos de la aeronave antes de una explosión.
Una de las personas que ayudó a ayudar a la pareja durante el accidente fue un barman llamado Federico que bajó a ayudar a Janan y dijo: "Dios está con vosotros, Dios está con vosotros", repitiendo la misma oración hecha por ella antes de la caída.
Frank y Janan fueron llevados al hospital y entraron en un coma inducido, debido a la dificultad respiratoria. "me dijeron que mientras estaba inconsciente, la gente iba a mi cuarto y oraba." Nunca averigüé quiénes eran, "recuerden al piloto."
Cuando recuerdas el momento del accidente, Frank sólo puede reconocer un milagro. "es como si Dios pusiera sus manos en nuestros asientos y dijera: ' no voy a dejar que nada te suceda. '" Él nos protegió ", dijo."
Dos meses después, Frank y Janan se están recuperando en casa con gran gratitud a Dios. "si no crees en Dios, escucha esta historia y dime si no hay Dios sobre todo." "eso no es suerte", destaca.
El capitán del cuerpo de bomberos, John Meffert, también cree que Dios protegió a la pareja ese día. "yo creo firmemente en los milagros y el 30 de junio VI a uno de los más grandes de ellos." La oración es muy poderosa ", exclamó."
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