Ciudad Guayana.- Salam Souki reapareció. El director de CamCaroní alzó su voz ahora como afiliado y no como excandidato de un proceso electoral que en su momento consideró amañado por la violación de los estatutos.
Tras dos meses buscando formas para llegar a un acuerdo por el bien de la institución, que incluyó una reunión con Fedecámaras Bolivar y algunos expresidentes en la que instó a resolver este asunto a lo interno, Souki exige que se convoque a elecciones transparentes, apegadas a los estatutos y las leyes de la República, y evitar la intervención del Tribunal Supremo de Justicia.
“Ante el rechazo del registro subalterno a la conformación de una nueva junta directiva de la Cámara de Comercio e Industria de Caroní, nos vemos en la necesidad de exigir a Yorman Hernández, quien para efectos legales sigue siendo el presidente, llamar a nuevas elecciones a través de una asamblea extraordinaria de afiliados con más de un centenar de firmas, y conformar una nueva junta electoral, neutral y equilibrada, para acabar con esta engorrosa situación que solo ha perjudicado la imagen de nuestra prestigiosa institución”.
Souki recuerda que estuvo ausente de la palestra pública durante los últimos dos meses porque buscó el acercamiento con todos los sectores en CamCaroní, en procura de una salida positiva y consensuada.
Incluso, afirma, esperó la presencia de Carlos Larrazábal, de Fedecámaras, y de María Carolina Uzcátegui, de Consecomercio, para solicitar su mediación en el conflicto.
Sin embargo, no fue posible. “En vista de esta situación, y de que la directiva ilegal sigue actuando como si nada ocurriera, instamos a un nuevo proceso en el cual se garantice la participación de todos los afiliados y se cumplan los pasos establecidos en los estatutos”.
A su juicio, este proceso reviste la máxima demostración de credibilidad y confianza que a lo interno debe existir, y proyecta a lo externo la imagen de una organización seria, responsable y transparente.
“La cámara necesita en este momento – país estar al dia con sus obligaciones y seguir defendiendo al empresariado. Seguir funcionando con una directiva rechazada, no reconocida, podria desencadenar problemas legales no deseados”.
Souki dejó claro que su interés ha sido resolver el conflicto a lo interno.
” El empresariado guayanés reconoce mi compromiso ético con la organización, a través de mi trayectoria como gremialista serio y responsable, por lo que ningún señalamiento cambiará mi convicción ni mi interés de luchar por una cámara donde todos cabemos, unidos por un mismo objetivo que es el desarrollo de nuestra ciudad y la estabilidad económica”. (GMG.com)
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