Tras el paso del huracán María por Puerto Rico el gobernador de la isla, Ricardo Roselló, solicitó ayuda humanitaria al gobierno de los Estados Unidos (EEUU) para socorrer a las familias afectadas por el ciclón.
La ayuda estadounidense parece haberse estancado en su aprobación y entrega, situación que agrava los problemas de la isla, ya que necesitan alimentos, agua potable, transporte; y la reactivación de las comunicaciones y la energía eléctrica.
Roselló indicó que muchos de los 13.000 policías que operan habitualmente en el país todavía no han podido acudir a sus puestos de trabajo debido a los problemas de comunicación.
Según la firma consultora AIR Worldwide, el huracán María, que provocó la muerte a una decena de personas en la nación caribeña, dejó entre 34.000 y 72.000 millones de dólares en pérdidas.
Por su parte, el presidente estadounidense Donald Trump, aseguró que viajará a la isla el próximo 3 de octubre, casi dos semanas después del huracán, ante las críticas por la demora del envío de ayuda al país.
Mientras tanto, el huracán María se degradó a tormenta tropical en su paso por las costas de Carolina del Norte en EEUU, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC por sus siglas en inglés) de ese país.
En su paso por Puerto Rico el huracán causo cuantiosos daños materiales y la muerte de al menos 10 personas, de igual modo causó otras 19 muertes en otras islas del Caribe.
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