Publicidad
Publicidad

Vivir en contacto con lo natural mejora la calidad de vida

Es un hecho que vivir cerca de animales y plantas aporta confort, salud y energía a nuestras vidas, que nos hace más felices y activos. En el caso de las plantas, podemos aprovecharnos del impacto tan positivo que realiza sobre nuestra salud, pues purifican el aire, mejoran el estado anímico manteniéndonos relajados, reducen el ruido, ayudan a nuestra piel, favorecen la concentración y nos mantienen activos gracias a los cuidados que requieren, entre otros muchos beneficios.

Vivir en contacto con lo natural mejora la calidad de vida

En cuanto a los animales, también nos empujan a tener mejor salud, pues con ellos es mayor la actividad física que realizamos, ya sea por los juegos, por sus cuidados o por los paseos que nos demos con ellos. Pero también son fabulosos para ayudarnos a expresar nuestras emociones, con ellos siempre somos y seremos nosotros mismos, facilitan la sociabilidad con otras personas, etcétera.

El contacto habitual con animales trae múltiples y directos beneficios a nuestro organismo, como la disminución de posibilidades de sufrir un ataque cardíaco, o el fortalecimiento del sistema inmunológico, pero también a nuestra psique al disminuir el sentimiento de soledad, al reducir el estrés o mejorar el estado de ánimo. En definitiva, tener un animal en casa mejora la calidad y la esperanza de vida.

Vivir con un perro en un inmueble

Sabemos las muchas ventajas y beneficios que nos aporta vivir con un animal. Habitualmente, el animal que elegimos para compartir nuestro espacio vital es un perro o un gato. Parece ser, la experiencia nos da la razón en esto, que los gatos se acomodan bastante bien, por regla general, al modo de vida de los seres humanos, no ocurre esto con la misma facilidad cuando hablamos de perros.

Es, en estos casos, cuando debemos preguntarnos qué significa vivir con un humano, y ponernos en su piel para asegurarnos de que le vamos a dar o le estamos ofreciendo en estos momentos una buena calidad de vida a nuestra mascota, debemos ser recíprocos en este sentido y no ser egoístas.

Por lo tanto, deberemos preguntarnos cuál de entre todas las razas de perros existentes puede adaptarse mejor a nuestras condiciones de vida, metros cuadrados de vivienda, espacios al aire libre… y cuál es el perro adecuado para ti según sus características y carácter, qué costumbres tienes y si estas son compatibles con las de la personalidad del animal. Por ejemplo, si no te gusta pasear, no puedes tener como compañero a perros grandes que necesitan ejercitarse, si no eres juguetón no deberías tener perros jóvenes…

Este pensamiento que nos pone en el lugar del animal es el que debería extrapolarse al resto de la población mundial, no solo ya para aquellos que deciden tener mascotas en sus viviendas, sino, sobre todo, para ser conscientes de que todos, tanto humanos como animales y plantas, compartimos un mismo hábitat, que debemos proteger y conservar, y que en este caso no somos propietarios, sino unos inquilinos más y nuestros vecinos tienen tanto derecho como nosotros a disfrutar de su espacio.

La lista de animales en extinción sigue creciendo

Parece que comienza a cambiar algo en la mentalidad del ser humano, que ha comenzado a tomar conciencia del lugar que ocupa dentro de un círculo en el que se establecen conexiones en ambos sentidos, tanto en el de ofrecer como en el de recibir, y que ese puesto de privilegio que nos hemos autoconcedidos de figura predominante sobre el resto de la naturaleza es un error que está causando un verdadero desastre natural, una extinción en toda regla.

Es alarmante la cantidad de animales en extincion que en la actualidad hay. La lista de animales en extinción no deja de crecer, y si en algún caso mengua es porque desgraciadamente uno de esos animales ha sido eliminado por completo.

Necesitamos un cambio radical de paradigma en el que el hombre deje de ser egocéntrico, es decir, deje de creerse el amo de todo lo que le rodea, y entender y concebir el mundo de manera ecocéntrica, en el que la naturaleza es el verdadero centro y todos giramos y participamos de ella, sin mayores ni menores exigencias que el resto de los seres vivos.

Necesitamos, con urgencia, entender que la vida y la naturaleza no son competencia, sino colaboración, que la ley del más fuerte fue un pensamiento político y económico que mal interpretó lo que realmente ocurre en la naturaleza para su propio beneficio. Necesitamos entender que la naturaleza es lo que es, precisamente por la colaboración que se establece entre los distintos organismos, no por la supremacía del más fuerte.

Esto puede comprobarse al observar la enorme biodiversidad que habita en los diferentes ecosistemas que encontramos en la naturaleza, donde innumerables especies cooperan entre sí por la supervivencia del conjunto. Es algo que también podemos comprobar en el propio ser humano, que no es más que una ingente cantidad de bacterias y formas minúsculas de vida colaborando estrechamente para mantener con vida a cada persona.

Puedes consultar la veracidad de lo que hemos afirmado a través de la consulta información en ecosistemas.ovacen.com. En esta dirección web podemos entender qué función tienen y cómo funcionan los ecosistemas, algo que nos ayudará a entender el papel que juega el ser humano en todo esto y cómo debemos seguir formando parte de estos lugares de vida, pues nuestra propia naturaleza los necesita para seguir subsistiendo.

La inconsciencia humana, derivada muy probablemente de sus descubrimientos técnicos y culturales, ha permitido que las sociedades crezcan y se desarrollen en sentido opuesto a la naturaleza, concibiendo en ella un peligro que debemos evitar, luchando contra ella, olvidando que esa absurda pelea es contra nosotros mismos.

Por último, cabe señalar que este cambio de paradigma social no se debe esperar de las grandes instituciones o de los gobiernos, las medidas necesitan implantarse ya para comenzar a revocar los terribles efectos que estamos provocando en el planeta, necesitamos acelerar estas acciones y esto solo puede activarse desde la concienciación y las acciones propias y particulares de cada uno de nosotros.

No importa si lo que hacemos es mucho o poco, si es algo, ya que será la suma de todas las pequeñas acciones lo que cambiará nuestra forma de concebir nuestra función en el mundo. Comienza por ti mismo, continúa expandiendo la idea y entre todos hagamos algo, pues el tiempo se agota.

Infórmate en las numerosas webs que gracias a Internet tenemos a nuestro alcance, webs informativas o colaborativas, comenzar a andar es lo más complicado.

NP/MA

Tags: 
Categoria: 


from Informe21.com - Salud y bienestar https://ift.tt/2LleZkc
via IFTTT

***Si quieres recibir en tu celular esta y otras informaciones, siguenos por Telegram, ingresa al link https://t.me/UpataDigital y dale click a +Unirme

Síguenos en: -Click Aquí-> Instagram

Síguenos en: -Click Aquí-> Facebook

Síguenos en: -Click Aquí-> Twitter

Síguenos en: -Click Aquí-> Grupo de WhatsApp

Facebook Diario Upata Digital Publicidad