Tener una sonrisa bonita o fea puede ser causa de complejos, baja autoestima o de problemas psicológicos derivados del inconformismo con nuestro aspecto físico.
Estos complejos han podido ocasionarse en muchos momentos de nuestra vida, desde la infancia, donde no ser aceptado o criticado en ocasiones puede hacer mucha mella en los niños o adolescentes, hasta en la vida adulta, donde la aspiración por la belleza perfecta y armónica es clave. Pero no todo es aspecto físico, este tipo de sonrisas imperfectas pueden ocasionar también problemas o patologías que van más allá de la belleza, pudiendo afectar nuestra salud bucodental e incluso general.
Sin embargo técnicas como Invisalign son capaces de conseguir auténticas obras de arte de la mano de expertos como Iván Malagón, el doctor asegura que son pocos los que nacen con una sonrisa perfecta y analiza los tipos de sonrisas imperfectas y aporta las soluciones para cambiarlas:
Sonrisa “de caballo”
• Consecuencia: Dientes muy adelantados “como si sobraran dientes”. Incompetencia labial, es decir, que no se pueden cerrar los labios adecuadamente. Arrugas en mentón por la tensión muscular de los labios.
• Causa: musculatura peri-labial poco tensa (hipotónica), respirar por la boca (y no por la nariz) o la falta de espacio para todos los dientes.
• Solución: la ortodoncia o colocación de los dientes es la solución adecuada.
Sonrisa “de anciana”
• Consecuencia: labios muy finos y con arrugas tipo “código de barras” en el labio superior, piel poco tersa (sin tensión).
• Causa: el hecho de tener una sobremordida (que los dientes de arriba cubran excesivamente a los de abajo) y otros factores, pueden provocar una disminución de la dimensión vertical y, consecuentemente, una altura facial inferior disminuida que hace que se arruguen los labios.
• Solución: aportar la inclinación y la nivelación correcta a los dientes mediante un tratamiento de ortodoncia.
Sonrisa “gingival”
• Consecuencia: muestra mucha encía al sonreír y hace que los dientes parezcan pequeños.
• Causa: aunque es multifactorial, es muy frecuente que sea causa de una erupción pasiva alterada (ausencia de desgaste normal de los dientes) y de un engrosamiento por inflamación de las encías
• Solución: el alineamiento de los dientes es la principal solución, aunque a veces se acompaña de un recontorneado gingival o “gingivoplastia” o, incluso, alargamiento coronario (recortar la encía con láser o bisturí eléctrico).
Sonrisa “de conejo”
• Consecuencia: sólo se ven los dientes de delante (incisivos), que suelen asomar por encima del labio inferior, sobre el que se apoyan. Los dientes no “rellenan” la boca, provocando unos pasillos oscuros a ambos lados, dando la sensación de no tener molares y premolares
• Causa: haberse chupado el dedo en la niñez (succión digital) es la causa más frecuente
• Solución: aportar la expansión que necesitan maxilar y mandíbula para crear el espacio necesario para alinear los dientes. El tratamiento: ortodoncia.
Sonrisa “asimétrica”
• Consecuencia: provoca que las líneas medias dentarias no estén centradas, asimetría de sonrisa (labios y dientes), mala mordida y dolor en articulación temporo-mandibular.
• Causa: suele tener una relación directa con determinados hábitos nocivos, como la succión digital (chuparse el dedo) o, incluso, con alteraciones posturales
• Solución: en edades tempranas, la prevención es lo adecuado. Un equipo multidisciplinar compuesto por ortodoncista, otorrino y logopeda, conseguirán que no se desarrollen anomalías óseas importantes.
Según Iván Malagón, “Por lo general, hay problemas que en ocasiones arrastramos desde la niñez acomplejándonos y que afortunadamente cada día tienen mejor solución”.
Fuente: Nosotras
RA
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