Eric Mock, del ministerio Slavic Gospel Association, dice que estos niños han sufrido traumas por el hecho de haber sido rechazados por sus padres, según Mission Network News.
En Rusia hay entre 500 mil a 700 mil huérfanos que se encuentran en orfanatos estatales. Al menos el 70% de estos niños tienen a sus padres vivos, pero debido a la pobreza, adicción a las drogas o por estar presos, el padre no puede cuidar de sus hijos. El otro 30 por ciento de los niños son verdaderos huérfanos, niños sin padres vivos.
"Le contamos a los niños que existe una esperanza que es inquebrantable, le contamos la asombrosa verdad de la increíble gracia de Dios. Le decimos que vida en la tierra es difícil, pero hay una esperanza que es inquebrantable", explica Mock.
Estos niños han visto a personas ir y venir a lo largo de sus vidas, incluso sus padres. Han sentido la destrucción que viene con esta inestabilidad. Algunos incluso han sentido lo que significa ser proyectos, se muestran en vacaciones o en viajes especiales, pero se dejan de lado cuando nadie está mirando.
A los misioneros no les importa situaciones que pueda impedirles cumplir con su misión, incluso cuando la temperatura desciende a 30 grados, ellos continúan trabajando. Estas personas hacen largos viajes para visitar a los niños varias veces al mes.
Estos miembros de la iglesia esencialmente viven la vida con estos niños de manera tangible presentándoles la idea de un Padre celestial que los ama y nunca los abandonará.
Mock comparte la historia de una joven, cuya vida fue impactada a los 12 años por la fidelidad de una iglesia. Hoy, ella es una de las miembros de la iglesia que ministra a los huérfanos al igual que otros jóvenes.
De Noticias Cristianas del Acontecer Cristiano
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