Cuando nos enfermamos o tenemos una condición de salud que nos hace ausentarnos del trabajo por un tiempo prolongado. Es un tema preocupante tanto para ti (para no perder tu empleo), como para la empresa por temas de productividad, cuándo, en qué condiciones y cuál va ser el nuevo esquema de trabajo y recuperación. Te decimos cómo reintegrarte a tu trabajo después de una enfermedad.
En entrevista para Salud180, Ivonne Vargas, especialista en Recursos Humanos, nos comparte cuál es el panorama y las recomendaciones para reintegrarnos al trabajo después de un tema de salud.
Un empleado que se reintegra a su vida laboral vive dos escenarios, una recuperación física que corresponde a los tratamientos médicos que está viviendo y también una recuperación emocional, aún cuanto está cubierto por seguridad social.
De acuerdo a cifras proporcionadas por Ivonne Vargas, entre el 52 y 55% de las empresas están preocupados en la baja de productividad, al reincorporar personas que estuvieron enfermas. Principalmente a causa de que las empresas no cuentan con políticas ni programas de reintegración.
Por ello, es importante sigas estas son las recomendaciones para reintegrarte a tu trabajo:
Desde el momento en que te enteras que tienes alguna enfermedad debes acudir con tu jefe inmediato y explicarle tu caso. Mostrar el posible panorama al que te enfrentes, si vas a ausentarte, hacer home office, asistir a horarios reducidos. Todo con el fin de llevar tu tratamiento.
En caso de que la comunicación con tu jefe directo sea deficiente, debes acudir con tu contacto directo en la empresa de Recursos Humanos o algún grupo de tu trabajo que vea estos temas.
Siempre debes conversar sobre las posibles ausencias debido al tratamiento al que te vas a someter y avisar con anticipación, pues de esta forma la empresa podrá prever tu ausencia y delegar. Además esto te brindará tranquilidad.
Genera redes de apoyo al interior de tu empresa.
Antes de comenzar con el ritmo laboral “normal” es importante realizar un ensayo. Plantea cómo va ser la dinámica de reintegración, es decir, puedes empezar con un par de horas e ir aumentando. Pregúntate si en verdad estás lista para volver al trabajo.
Valora si quieres estar en el mismo empleo o tu panorama y prioridades cambiaron. Tal vez sea tu oportunidad de realizar ese sueño y comenzar de nuevo.
Si decides que si quieres un nuevo trabajo, debes prepararte para entrevistas, redes de contactos y currículo. Tal vez quieras emprender ese negocio que siempre has tenido en mente.
Conversa con compañeros de tu empresa, que te ayuden a actualizarte y ponerte al día.
Sin duda, estas recomendaciones de Ivonne Vargas, serán de gran utilidad para tu reingreso laboral después de una enfermedad e incapacidad y que este episodio de tu vida, sea más llevadero. Recuerda no auto discriminarte, pues tu talento y capacidades ahí siguen.
Fuente: Salud180
EA
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