La huelga sindical contra un proyecto de reforma tributaria en Costa Rica cumple hoy 23 días con manifestaciones en distintas zonas del país, pero la participación en el sector salud se redujo, aseguró el Gobierno.
El bastión del movimiento siguen siendo los sindicatos del sector educación, los más grandes del país, pues la mitad de los centros educativos se encuentran cerrados y el resto funciona con diversos niveles de afectación.
La Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza (APSE) informó de movilizaciones este martes en varios puntos de todas las provincias del país: Guanacaste, Puntarenas, Cartago, Heredia, Limón, Alajuela y San José.
Los sindicatos también mantienen presencia en los alrededores de la Asamblea Legislativa, donde los diputados discutían esta semana un total de 368 mociones al proyecto de reforma fiscal llamado Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.
La Asociación de Profesores de Segunda Enseñanza criticó al ministro de Educación, Edgar Mora, al considerar que está hostigando a los maestros al pedirles en medios de comunicación y mediante una directriz que regresen a las aulas sin temer represalias.
El otro bastión de la huelga ha sido el sector salud, pero el Gobierno informó que este martes la participación de trabajadores en esta área ha disminuido al 9,5 por ciento, la más baja durante el movimiento que comenzó el pasado 10 de septiembre.
Esto ocurre luego de que el lunes una jueza de Trabajo declaró ilegal la huelga en la Caja Costarricense del Seguro Social, ente que dirige los centros de salud del país, al determinar que está prohibido este tipo de acciones de protesta en servicios esenciales.
Los sindicatos tienen tres días para apelar el fallo.
Los datos de la CCSS indican que este martes la afectación en las salas de operación es de un 24,8 por ciento y en la lavandería de un 12,7 por ciento, que son los dos servicios más impactados.
Hasta el lunes pasado la CCSS contabilizaba 90.588 citas médicas canceladas y 2.999 cirugías postergadas.
Por el momento, los jueces de Trabajo han declarado ilegal la huelga en 12 instituciones públicas y legal en una, de un total de 32 que solicitaron la ilegalidad del movimiento.
Mientras tanto, el Congreso continúa el trámite de las mociones al proyecto de ley, lo que abriría la posibilidad de que la siguiente semana el proyecto sea votado en el primero de dos debates necesarios.
Si es aprobado en el primer debate, el texto de reforma fiscal será enviado a consulta de la Sala Constitucional, de cuya resolución dependerá si se realiza la segunda y definitiva votación.
La huelga sigue luego de que el domingo las bases sindicales rechazaran un acuerdo alcanzado por sus dirigentes con el Gobierno.
La reforma fiscal tiene como punto estrella la conversión del impuesto de ventas del 13 por ciento en uno de valor agregado (IVA) de la misma tasa pero que gravará los servicios y de manera diferenciada algunos productos que antes estaban exentos.
También incluye cambios en el impuesto sobre la renta, renta de capital, renta global y medidas para reducir el gasto público, como por ejemplo la disminución de pluses salariales.
Los sindicatos consideran que la iniciativa afectará a los pobres y clases medias y beneficiará a los ricos, algo que el Gobierno niega porque afirma que se trata de una ley progresiva para paliar el déficit y estabilizar las finanzas. EFE
EA
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