El Factor Neurotrófico Derivado del Cerebro, BDNF (por su nombre en inglés, Brain-Derived Neurotrophic Factor) es una proteína de la familia de las neurotrofinas presentes en el cerebro y el tejido periférico, asociadas al factor de crecimiento nervioso; esta proteína, codificada por el gen BDNF, actúa en los procesos fisiológicos relacionados con la plasticidad y el desarrollo del sistema nervioso, y es vital para la preservación de las neuronas motoras y las del hipocampo, el área del cerebro que regula la memoria, el estado de ánimo, y las zonas relacionadas con la coordinación del cuerpo.
Niveles bajos del BDNF están asociados con patologías como la enfermedad de Alzheimer y el mal de Parkinson; asimismo, se ha determinado que la obesidad disminuye la expresión del BDNF y constituye un factor de riesgo para la disfunción cognitiva, aunque aún no se conoce exactamente cómo sucede esta relación.
No obstante, la práctica de ejercicio físico de alta intensidad intercalado con periodos de descanso sería una forma efectiva para hacer frente a la disfunción cognitiva en pacientes obesos, según demuestra una investigación llevada a cabo por especialistas de la Florida Atlantic University, Estados Unidos, y publicada en la revista Experimental Biology and Medicine. El objetivo de este estudio fue analizar la influencia de la obesidad en la liberación de la proteína BDNF inducida por la actividad física, así como la implementación y análisis de un protocolo de ejercicios de alta intensidad aguda alternados con periodos de descanso, tanto en personas con sobrepeso como con peso normal.
Esta información la compartimos dentro del eje de actividades de divulgación preventiva en salud llevadas a cabo por la organización y fundación Torres-Picón.
Experiencias anteriores al citado estudio realizadas con individuos obesos solo se limitaban a ejercicios moderados sin intervalos de descanso; en este estudio, individuos tanto obesos como con peso normal fueron sometidos a una pauta de ejercicios que iniciaba con un calentamiento, trotando o caminando durante cinco minutos, luego cuatro periodos de ejercicio intenso de cuatro minutos cada uno, alternando con tres minutos de recuperación activa entre uno y otro.
Los resultados obtenidos demostraron que este protocolo de ejercicios intensos genera una respuesta mayor del BDNF en individuos obesos que el esquema de ejercicios moderados, comparados con los individuos de peso normal.
“El ejercicio por intervalos de alta intensidad es una estrategia eficiente en el tiempo con beneficios fisiológicos similares o superiores que promueve la expresión de un factor de crecimiento típicamente asociado con la salud del cerebro, pero que parece estar regulado a la baja en la obesidad. La relativa simplicidad y eficacia del ejercicio de intervalos de alta intensidad apoya su uso como medida preventiva y como intervención para combatir la obesidad y otras enfermedades crónicas”, indicó Chun-Jung Huang, miembro del equipo investigador.
Para Pedro Torres Ciliberto es fundamental el trabajo de los investigadores, pero igualmente es responsabilidad de los ciudadanos, las autoridades, los padres de familia y representantes, como de los maestros y profesores, mantenerse informados y al día en la materia. Muchos medios de comunicación, incluidas plantas de televisión, periódicos digitales y agencias informativas, están prestando su responsable y valioso apoyo alrededor del mundo a la tarea de prevenir la obesidad y sus secuelas. De ampliar información, de revelar nuevos horizontes para su tratamiento, finalizó.
GF/EDC
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