Marta Duque, colombiana de nacimiento, vivió en Caracas desde los 12 años y trabajó por muchos años como empleada del hogar. Ahora de vuelta en Colombia le abre las puertas de su hogar a migrantes venezolanos
En la página web Acnur nos cuentan desde sus inicios la historia.
Marta está de vuelta en Colombia su tierra natal. Hace unos dos años convirtió su garaje, y después su humilde casa familiar, en un albergue improvisado para refugiados y migrantes venezolanos que hacen por tierra el incierto viaje hacia destinos en toda Colombia y en otros países.
Marta cuenta: “Todo comenzó cuando vi la gente en el puentecito que hay frente a mi casa con un techo”, decidió acoger en un espacio de la casa que acondicionó para que no pasarán frío. En un pequeño patio ella y su equipo, alrededor de 10 voluntarios preparan ollas gigantes de sopa en una estufa de leña.
“Estaban mojándose, llovía y hacía mucho frio, y se me ocurrió abrir la caseta en la que guardamos el carro para que al menos no pasaran la noche en la intemperie”.
Dos años después, varias docenas de mujeres, infantes y bebés abarrotan todas las noches la casa de Marta, que fue prácticamente cedida a un grupo flotante de huéspedes temporales: los muebles de la sala se apilaron para dejar espacio a las colchonetas donde hasta cien personas duermen cara a cara.
Pamplona, donde vive Marta, está a unos 70 kilómetros de la frontera, y los llamados caminantes, como se les conoce, la alcanzan tras varios arduos días de camino arrastrando maletas, acunando a niñas y niños pequeños y a bebés, comiendo en comedores populares gestionados por agencias de cooperación y ONG y durmiendo en albergues cuando hay espacio, y cuando no, a cielo abierto.
La necesidad es grande. Más de 4 millones de venezolanos han abandonado su país desde 2015, huyendo de la inseguridad y la violencia, persecuciones y amenazas, la escasez crónica de alimentos y medicamentos y el colapso de los servicios básicos.
Unión Europea, Acnur, OIM
Por todas las vivencias es que organizaciones como Acnur, Unión Europea y y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), se han ocupado de la situación de la migración venezolana, otorgándole carácter de urgencia y han realizado una Conferencia Internacional de Solidaridad de alto nivel en la que se pide acción urgente y concertada en favor de las personas refugiadas y migrantes de Venezuela.
La conferencia, que se celebró en Bruselas los días 28 y 29 de octubre, se planteó como objetivo crear conciencia de la crisis, reafirmar los compromisos mundiales con los países y las comunidades de acogida, evaluar las buenas prácticas y los logros, confirmar el apoyo internacional a una respuesta regional coordinada y pedir una mayor cooperación técnica y financiera internacional con la región.
Informe21/LJ
Pequeñas acciones de personas increíbles hacen la diferencia.
Marta es una mujer que ha convertido su hogar en un albergue para mujeres, niños y niñas. Diario prepara comida y se alista para recibir a refugiados y migrantes venezolanos.
Mira su historia https://t.co/Q0vCg9mL22 pic.twitter.com/C8uCdT8txU— Acnur/Unhcr Américas (@ACNURamericas) October 29, 2019
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