La cuarentena somete a muchas personas al aburrimiento del encierro y la monotonía. Es por eso que la infidelidad prevalece incluso ha mutado a los “cachos online”.
“Las tentaciones de ser infiel crecen por consecuencia del aislamiento”, explicó el especialista en terapia de pareja, Rafael Ocasio.
“Toda infidelidad comienza con un mensaje de texto, una solicitud de amistad, un encuentro improvisado, entre otras cosas, por lo cual la manera de conocer otras personas que pueden convertirse en un potencial amante sigue igual, lo que cambio fue la forma en que son infieles”, explicó el experto.
Asimismo, el experto comentó que uno de los sentimientos que predomina al ser humano es el aburrimiento, al que considera “el enemigo del aislamiento” después del coronavirus.
De esa manera agregó que “el estar tanto tiempo entre cuatros paredes resalta factores negativos de las personas, pero la mentalidad de muchas personas es que prefieren ser infiel antes de terminar unas relación”.
Parejas en la pandemia
Ocasio aseguró que ha tratado a muchas parejas desde la pandemia y que al menos el 60% son por problemas de infidelidad. “Últimamente recurren a mensajes, fotos, llamadas largas, etcétera, muy pocos han admitido salir con estas personas porque no es seguro por el virus y para no levantar sospechas”.
Es por eso que el especialista resalta que las infidelidades son perspectivas que cambian para todo el mundo. “Es más un tema de confianza, porque algunos ven un infidelidad cuando hay besos o sexo, mientras que otros ven como una infidelidad el simple hecho de sentir atracción por otra persona y querer entablar una relación con esta, aun sin haber besos ni contacto físico”, explicó.
“Solo a quien engañaron tiene derecho a darle una explicación a la infidelidad que experimentó. Sean mensajes o sea sexo, no hay un nivel de exageración cuando se trata de sentimientos”, reflexionó Ocasio.
Matrimonios en cuarentena
La terapeuta de parejas, Yareli Zabaleta señaló que la cuarentena pone en peligros los matrimonios porque “cuando ambos se ven en la obligatoriedad de estar en el mismo espacio por más tiempo de lo acostumbrado, se comienzan a notar las costuras del otro, los defectos saltan a la vista y los celos por el uso excesivo del celular son el pan de cada día”.
“Es importante considerar el hecho de que en medio de esta pandemia todos hemos tenido miedos y ansiedad y al no contar con recursos internos para manejar estas emociones, el estrés y la poca tolerancia genera explosiones frecuentes”, explicó la especialista resaltando los aspectos negativos como: roses fuertes, imposiciones, manipulación y control de ambos miembros de la pareja.
Indicó que hay ocasiones donde “la situación se agrava a causa del tema económico, cuando uno solo es quien sostiene, ese se cree dueño del otro en algunos casos”.
Por: María Isabel Rangel
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