Los habitantes de la ciudad de Upata alzan su voz una vez más ante el mega robo de más de 8 mil bombonas de gas al cumplirse un año más de este hecho y que hasta el momento sigue impune. Familias enteras continúan esperando la devolución de los cilindros, mientras que la falta de transparencia y control en la gestión de esta situación ha generado indignación en la comunidad.
A pesar de encontrarnos en un año electoral, los representantes del partido gobernante en el municipio de Piar no han dado la cara ni han restituido las bombonas robadas, dejando en deuda a un gran número de habitantes de la ciudad. La falta de rendición de cuentas y la opacidad en el manejo de los recursos destinados a reponer los cilindros robados ha generado un clima de desconfianza y malestar entre la población.
Diversos sectores de la ciudad siguen siendo afectados por las consecuencias de este escandaloso robo, entre ellos Villa Canaima, Hipódromo Sur, La Loma, Coviaguar, Merecure, San Antonio, Casco Central, Libertador, parte baja de San Lorenzo, entre otros. A pesar de que la municipalidad manejó más de 100 mil dólares para hacer frente a la reposición de las bombonas robadas, no se han presentado cuentas públicas claras sobre el destino de estos fondos.
Ante esta situación, los habitantes de Upata exigen respuestas claras, transparencia en la gestión de los recursos públicos y justicia para las familias afectadas por este mega robo.
La impunidad y la falta de rendición de cuentas no pueden ser toleradas en una sociedad que busca el bienestar y la seguridad de sus ciudadanos.
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