He conocido a personas que perdieron la cordura por una fondue de queso. Y otras tantas que no saben lo que es una comida sin muzzarella. Así es el queso, mueve pasiones. Y para dejar todo muy claro, los científicos se encargaron de hacer una investigación para comprobar su efecto adictivo.
El queso es un alimento adictivo
Según un estudio científico el queso contiene un producto químico encontrado en las drogas adictivas. Los investigadores detrás de este estudio se propusieron determinar por qué algunos alimentos son más adictivos que otros y descubrieron que el queso es particularmente potente porque contiene caseína.
Esta sustancia está presente en todos los productos lácteos y puede motivar a los receptores de opioides del cerebro, vinculados a la adicción. Los investigadores también encontraron que los alimentos procesados estaban más asociados a un comportamiento adictivo. Además encontraron que los alimentos que estaban primeros en una «escala de adicción» eran los que contenían queso.
Para hacer la investigación le pidieron a 120 estudiantes universitarios que escogieran entre 35 alimentos de diversos valores nutricionales. Una segunda parte del estudio incluyó a 384 personas que fueron estudiadas con los mismos alimentos, pero en un orden lineal jerárquico.
La caseína es una proteína de la leche que a su vez libera casomorfina. Descubrieron que la casomorfina genera adicción, comparable a lo que producen otras drogas como la morfina. Por eso algunos científicos se atrevieron a denominar al queso como una «droga láctea».
Ahora todo tiene sentido... mi amor por el queso no es más que una adicción. No importa que los científicos digan que es una «droga láctea», ¡el queso siempre va a estar presente en mis comidas!
Fuente: vix / MF
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