Tal cual en la película El Gran Cañón, una señora caminaba y escuchó un llanto. Eso ocurrió en Villa Betania. La dama siguió el ruido y encontró a un bebé que lloraba y pataleaba, tal cual le ocurrió a la esposa de un ejecutivo de una empresa norteamericana que trotaba todos los días por unas calles y escuchó un llanto y encontró a un bebé abandonado.
Claro eso fue en la vida real no una película. La dama rescató al bebé entre la zona boscosa y lo llevó al Centro de Coordinación Policía Altos del Caroní y allí lo entregó.
Los policías no lo llevaron inmediatamente a las oficinas de la Lopna sino que cotejaron este caso con una denuncia que una mujer hizo el miércoles. Ella llorando dijo ante los uniformados y los del Cicpc que le habían robado el niño pero aun no la habían llamado para pedir el rescate.
Los funcionarios del Cicpc fueron a buscar a Rosángela Astudillo Jiménez (38) y la presionaron hasta que la señora confesó que ese era su bebé y que ella lo había abandonado porque no podía tenerlo más. Lo cierto del caso es que ahora está detenida mientras su bebé espera que las autoridades localicen al padre o a algún familiar.
De Ciudad Guayana
Comentarios: