“No tenemos agua ni para lavarnos las manos a cada rato. Entonces, siendo el agua un derecho humano, nosotros tenemos que exigir al Estado que cumpla. Y no solamente es que necesitamos agua, es que necesitamos agua potable, porque la que sale a veces por la tubería parece un guarapo de papelón”, denunció Aura Rondón, una vecina del sector Los Olivos.
Rondón añadió que no están dispuestos a aceptar soluciones temporales. “No queremos pañitos de agua caliente. No queremos que le pongan un parche a un tubo. Queremos una solución definitiva, porque es nuestro derecho. Además, cada día nos suben el precio del agua y no tenemos el servicio”, enfatizó.
En zonas como Villa Africana, el problema data de hace varios años. Janeth Silva, quien vive en ese sector, dijo que el suministro del recurso hídrico fue suspendido definitivamente hace cuatro años. Desde entonces, ella y las demás familias deben comprar agua a camiones cisternas.
“La cisterna está cada día más costosa. El tanque de 1.000 litros sale en seis dólares, y no tenemos cómo pagar eso porque la mayoría somos jubilados que ganamos siete bolívares al mes”, recalcó la manifestante.
Los vecinos dijeron que han decidido dejar de hacer reclamos solo por redes sociales y continuar con las protestas de calle hasta que se logre una solución definitiva. Al lugar de la manifestación llegaron las concejalas Aída González y Aliana Estrada, electas por la opositora Mesa de la Unidad Democrática.
González y Estrada respaldaron el reclamo de los ciudadanos e informaron que se organizarán con los afectados para que tengan un derecho de palabra en la Cámara Municipal, con el fin de exponer el problema ante organismos gubernamentales.
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