En pareja, existen muchas etapas que tienen que ver con la relación. La confianza y el paso de los años van creando diferentes estados en la relación, y por eso es muy necesario que tengamos en cuenta que hay que trabajar el amor para que no se pierda.
No olvides que lo que un día les unió fue el amor. Es decir, no dejes que se olvide el hecho de que lo más importante que hizo que empezase vuestra relación fue ese enamoramiento. Esas mariposas en el estómago y el corazón latiendo a mil por hora.
Por eso, la dulzura nunca debe perderse. Hablarse con respeto, con cariño, siempre demostrando que la confianza y el amor forman parte de la pareja, hará que la magia permanezca intacta.
Presta atención a los pequeños detalles
Hazlos, y valora que tu pareja los haga por ti.
Ese zumo de naranja por la mañana para evitar resfriados, un masaje en los pies tras un largo día de trabajo, un libro porque sí, una película en el cine entre semana… Esas pequeñas cosas son los detalles que marcan la diferencia y harán que se unan aún más.
Prioridades
A veces, la magia del día a día es que tu pareja sepa que está presente en tu lista de prioridades diarias, lo que quiere decir que siempre le pondrás en los primeros puestos de tu vida.
Pequeños esfuerzos, detalles bonitos… La magia a veces está presente en los hechos y no en las palabras.
Cariño
La magia es cariño, es entrega y también es pasión. Haz que tu relación de pareja sea un remanso de paz, donde la casa sea vuestro particular oasis y todo esté en perfecta calma.
Los problemas pueden venir, pero siempre habrá una buena base.
Fuente: Nosotras
RA
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