Se ha dicho en muchas oportunidades que el desayuno es la comida más importante del día. Sin embargo, ¿qué tan necesario es? ¿Qué dicen los estudios? Te lo contamos.
La afirmación de que el desayuno es necesario para tener una alimentación saludable hace un tiempo que plantea serias dudas. La necesidad y la importancia de la primera comida del día tuvo en su momento inicial un gran empuje de la industria alimentaria. No en vano, es la única comida del día que tiene alimentos especialmente indicados para ella. Veamos qué hay de nuevo sobre este tema.
¿El desayuno es necesario?
Hoy en día podemos afirmar que no hay ninguna comida del día que sea imprescindible. Lo cierto es que muchos de los estudios relacionados con los beneficios de desayunar son de tipo observacionales.
¿Qué quiere decir esto? Que se ha observado que las personas que desayunan tienden a tener un mejor estado de salud, pero no se ha podido demostrar que la causa sea el desayuno.
Lo importante en cuanto a alimentación es lo que acabamos comiendo al final del día. Que la cantidad sea adecuada a nuestras necesidades energéticas y que, además, esté formada por alimentos saludables. Como casi siempre, en temas alimentarios no hay una fórmula única que valga para todas las personas.
El consejo de realizar 5 comidas al día puede ser válido para algunas personas, pero para otras puede ser suficiente con concentrar toda la ingesta en dos comidas más abundantes.
Por lo anterior, es necesario ir dejando atrás la idea de dieta ideal, para ir adaptando unos hábitos saludables de alimentación individualizados para cada persona.
¿Que pasa si nos saltamos desayuno?
Algunas personas se levantan por la mañana y no tienen hambre ni ganas de desayunar, o bien, pueden alargar un poco la toma del desayuno tomando un café o una infusión a primera hora.
Esto no quiere decir que vayan a tener un peor rendimiento físico ni más cansancio durante la mañana. Tampoco que vayan a atracar la nevera a la hora de comer. Cada persona debe conocer su cuerpo y sus necesidades, y adaptar sus comidas a ellos.
Incluso, se han podido observar beneficios en el hábito de no desayunar. Estos se han estudiado en algunas personas que siguen protocolos de ayuno intermitente. Algunas veces, las ventanas alimentarias de 8 horas implican saltarse el desayuno o retrasarlo unas horas.
La práctica del ayuno intermitente se ha asociado con una menor ingesta de calorías, una mayor pérdida de peso y una mejor composición corporal.
Aunque es recomendable concentrar las comidas durante el día, no se han visto perjuicios en aquellas personas que hacían sus comidas a última hora de la noche. Tan positivo es hacer un desayuno y un almuerzo, que un almuerzo y una cena temprana.
¿Cuándo es aconsejable desayunar?
Cuando no llegamos a comer suficiente
Saltarse el desayuno no tiene que ser sinónimo de comer menos, ni de estar desnutrido. Cómo hemos comentado, es muy importante que a lo largo del día la ingesta de alimentos esté balanceada.
Por lo tanto, el desayuno será necesario si a lo largo del día no somos capaces de comer todo lo que nuestro organismo requiere para funcionar bien.
Si tenemos problemas digestivos
No es aconsejable hacer comidas muy copiosas cuando padecemos problemas como gastritis, digestiones lentas, hernia de hiato o si no tenemos vesícula biliar. En estos casos, hacer una ingesta durante la mañana, e incluso un pequeño tentempié a media mañana puede ser muy positivo.
Cuando acabamos comiendo cualquier cosa
Si nos levantamos por la mañana con poco tiempo y poca hambre, y a media mañana nos vamos directos a la máquina a por un snack. Entonces, es necesario empezar a desayunar en casa o planificar una pausa a media mañana para introducir alimentos saludables.
Si nos hemos pasado por la noche
Si nos levantamos sin hambre por la mañana porque por la noche hemos comido más de la cuenta o hemos picado cualquier cosa antes de ir a la cama, lo mejor será mejor corregir las cenas en cuanto a calidad y cantidad de alimentos. De esta forma, seguramente, poco a poco iremos teniendo más hambre durante la mañana.
Si vamos a desayunar, que sea saludable
La evidencia parece clara: No hay nada de especial en el desayuno. Si nos levantamos y tenemos hambre por la mañana, o creemos que desayunar puede mejorar nuestra alimentación, vamos a comer un desayuno saludable.
Mejorar el desayuno en cuanto a calidad e variedad de alimentos es muy importante. Es necesario aprovechar todos los avances que se han echo en este sentido, para trabajar en unos hábitos alimentarios saludables en general.
El desayuno es un buen momento para introducir determinados alimentos y nutrientes importantes en nuestra salud:
Frutos secos. Son una buena fuente de proteínas y minerales, sobre todo para veganos. Además, no debemos preocuparnos por sus grasas, ya que tienen un perfil lípidico saludable.
Copos de avena, copos de cereales integrales o pan integral. Son una buena fuente de fibra, si nos cuesta llegar a las raciones de fruta y verdura.
Huevos, yogures, queso o tofu. Deben ser la fuente de proteínas de las mañanas.
Frutas y verduras, para acompañar nuestro muesli o nuestras tostadas.
¿Cuán necesario es el desayuno? Quizás hayamos exagerado con la importancia de esta primera comida del día, aunque está claro que este debe ser saludable si queremos cuidar nuestra salud.
¡Tenlo en cuenta!
Con información de Mejor con Salud.
EB
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